VOSOTROS que dijisteis SÍ a la firma de los Nuevos Sistemas Variables.
VOSOTROS que durante meses, en vez de informarnos de todo lo que se estaba cociendo a nuestras espaldas, os dedicabais a hablar y echar propaganda sobre la crisis y la gran amenaza de falta de carga de trabajo, intentando concienciarnos de la necesidad de ser “más competitivos y reactivos” (discurso más propio de un gerente de la empresa que de unos “representantes sindicales” ¿no creéis?), todo esto para preparar el terreno a la empresa, acojonando y que esta impusiera los Nuevos Sistemas sin resistencia ninguna, haciéndonos creer que no hay más remedio que tragar.
VOSOTROS que os negasteis a hacer una asamblea general de trabajadores, a pesar de que fuimos muchos los que la pedimos (más de los que la ley exige) en un momento crucial para nosotros, en el que estaban en juego nuestras condiciones laborales tal y como las conocíamos hasta ahora.
VOSOTROS que encima presumíais de que dicho “acuerdo” tenía más contenido vuestro (de los sindicatos que firmasteis) que de la empresa, y que por tanto no era tan malo como algunos lo pintaban, llamando alarmistas a algunos compañeros e incluso atreviéndoos a decir en algunos casos que este sería un sistema más justo (¡¡…!!)
VOSOTROS que asegurabais que todo esto era “por el reparto y la conservación del empleo” y ahora veis con indiferencia como estos Nuevos Sistemas lo que le permiten a la empresa es un recorte aún mayor en personal horario, pues cuanta más flexibilidad nos impongan menos gente necesitaran para una mayor apertura.
VOSOTROS que nos habéis deseado una “feliz navidad” firmando las puntas de producción sin tener porqué, saltándoos vuestras propias normas.
VOSOTROS que incluso con el calendario de este año en la mano, en el que ya se puede ver cómo nos afectan los Nuevos Sistemas Variables, seguís defendiendo este “acuerdo” como algo justo y necesario.
VOSOTROS que NO vais a sufrir en vuestras carnes las consecuencias de nada de esto, pues ya estamos al tanto de vuestros cambios de puesto y de horarios, aumento de vuestras horas “sindicales” y demás favores miserables que recibís de la empresa a cambio de vender nuestras vidas.
VOSOTROS que parecéis haber olvidado lo que sois, o erais, y no dudáis en mentirnos a la cara día tras día.
VOSOTROS SOIS CULPABLES:
Culpables de esta bajada de pantalones que tanto ha empeorado nuestras condiciones laborales.
Culpables de haber anulado un convenio en plena vigencia bajo la repetida excusa de la crisis, algo nunca visto en la historia de esta fábrica.
Culpables de la pasividad y resignación que reinan en los talleres, pues lo fomentáis con vuestra propaganda, vuestra actitud y vuestros discursos sobre “las necesidades de la empresa de que seamos más competitivos y flexibles”, justificando al enemigo en vez de intentar combatirlo. Así como manteniendo una desinformación total en los talleres acerca de lo que, como trabajador, se debe aceptar y lo que no, de hasta donde debemos tragar, de cómo funcionan nuestros, cada vez más enrevesados, Sistemas de trabajo
(los nuevos y los viejos), etc…
Sois Culpables de todo esto por estar donde estáis y actuar como actuáis. La empresa pide más y más, y vosotros firmáis. Lo primero es lógico, lo segundo vergonzoso. No sois representantes de obreros sino portavoces de las necesidades del empresario. No podéis disimular vuestros intereses burocráticos, ajenos a los intereses de los trabajadores, y lo que es más insultante, ya ni siquiera lo intentáis. ¿No será que nos habéis perdido el respeto?
Impedís que surja cualquier tipo de organización y lucha obrera real ya que os habéis apoderado de nuestras herramientas vaciándolas de contenido y utilidad: Vuestras movilizaciones controladas y vacías de objetivos, pactadas previamente con “los amos” para hacer el teatrillo de turno, hacen que ya la gran mayoría nos quedemos al margen, como espectadores pasivos en vez de protagonistas, por no querer formar parte de vuestros paripés.
Vuestra organización burocrática hace imposible la participación real de cualquiera de nosotros en los asuntos que tratáis (que son los nuestros) habiéndoos convertido en una especie de mafia que controla el cotarro.
Vuestras “asambleas”, son meramente simbólicas, otro paripé para mantener vuestra etiqueta de “demócratas”, sólo son reuniones “informativas”, en las que está mejor visto ir a “ver, oír y callar” que a
opinar, dirigidas y manipuladas por los cabecillas de turno hasta el punto de quitarle las ganas de volver jamás a cualquiera con un mínimo de inteligencia y honradez.
Encima os atrevéis a justificar vuestros chanchullos con la empresa bajo la excusa de que somos pasivos, que no respondemos cuando nos convocáis para vuestros paripés, que no estamos dispuestos a “luchar”.
No tenéis vergüenza. Sois culpables directos de esta pasividad y de que nadie crea ya en la utilidad de huelgas o manifestaciones, ya que mientras seáis vosotros los que estéis detrás de ellas, no servirán para nada, más que para vuestros intereses, claro.
Estamos hartos ya. Hartos de que nos tratéis como a imbéciles, de que nos mintáis y nos chuleéis, hartos de vuestra demagogia, de oíros hablar como empresarios, hartos de vuestra falta de respeto y sobre todo de que por vuestros intereses egoístas estemos todos condenados a una vida cada vez más servil.
Parece que para que nosotros podamos volver a levantar la cabeza antes van a tener que caer las vuestras.
NO SOIS COMPAÑEROS, SOIS ENEMIGOS, y como tales debéis ser tratados.